sábado, 29 de agosto de 2009

Pasos de baile

Se había enamorado de ella desde el mismo instante en el que había hecho su aparición en el gran salón real. Embelesado por su belleza, el joven heredero salió al encuentro de la hermosa doncella, dejando desatendidas a la decena de damas que suplicaban sus atenciones. Tal era su estado que no se había percatado de que estaban bailando hasta casi el final del quinto vals. El príncipe era bien conocido en el reino por su torpeza a la hora de moverse al son de la música, así que él era el primer sorprendido. Tuvo que mirarse a los pies para convencerse. Unos segundos después deseó no haberlo hecho.
- Bo...bo...bonitos zapatos - balbuceó.
- ¿Os gustan? Me los ha regalado mi madrina. Están hechos a medida y son de auténtico cristal tallado.
- Ya, ya veo
La mitad de las damas de la corte calzaban ese tipo de sandalias. Las había puesto de moda una estúpida princesa de un reino vecino, que gracias a ellas había vivido un particular cuento de hadas. Todas querían repetir fortuna.
El príncipe sintió como unos sudores fríos recorrían su espalda. ¿Cuánto quedaría para que finalizase el vals? Trató de concentrarse. Lo importante era mantener el ritmo: un, dos, tres, un, dos, tres... De pronto notó un chasquido bajo su pie izquierdo, y por un instante pudo percibir el olor de la sangre que manaba del zapato de su pareja.
Era el tercer incidente en lo que iba de año.

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Bueno pues este es el cuento-prólogo previo a la próxima entrega de "Haciendo llorar a los niños", que al final se me está retrasando más de lo que pensaba...Sabéis de que cuento va a tratar ¿no? Jejeje...

Siempre he pensado que los zapatos de cristal son poco prácticos, porque cuando no los llevas puestos parecen ceniceros y si los calzas, con lo delicados que son, se te pueden romper dando lugar a situaciones nada agradables.
En fin, supongo que es la magia de los cuentos de hadas, que estas cosas nunca pasan.
¡Hasta la próxima, Cuentistas!

5 comentarios:

  1. xD Qué bueno...
    Además de poco prácticos yo los veo poco estéticos, que eso no transpira... Jo, que ascazo más grande... Ya tengo ganas de leer esa nueva entrega de "haciendo llorar a los niños" :D

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  2. ¡Me encanta este relato, es una idea genial!

    Esperaré con ganas el nuevo "Haciendo llorar a los niños" :)

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  3. Me encanta Marina! Por cierto, tiene que doler 'un poco' lo de los zapatos...
    Pd. Queremos hacer llorar más a los niños!!!

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  4. Jajajaja ¡muy bueno!
    La Madrina era poco practica!

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  5. MM: ¿verdad? Bien pensado, los zapatos de cristal prêt a porter son la cosa más inútil que existe...
    ¡Muchas gracias por tu comentario!
    :)

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